Una aplicación de los autovectores de es la de resolver una ecuación de recurrencia lineal.

Conejos y Fibonacci

Fibonacci presento en 1202 la solución al siguiente problema:

Cierto hombre tenía una pareja de conejos en un lugar cerrado y deseaba saber cuántos se podrían reproducir en un año a partir de la pareja inicial, teniendo en cuenta que de forma natural tienen una pareja en un mes, y que a partir del segundo se empiezan a reproducir.

La cantidad de parejas de conejos en cada mes, se puede describir por la variable bajo las condiciones:

Partiendo de las condiciones iniciales, se calcula que . Luego, . Después , , etc.

El problema es que para calcular necesito comenzar a calcular . Queremos hallar de ser posible, una fórmula cerrada para hallar sin necesidad de calcular todas las anteriores.

Planteo Algebráico

La ecuación puede escribirse de forma matricial como:

A fin de obtener un sistema cuadrado, vamos a agregar una segunda ecuación trivial que no modifica al sistema: .

Vemos entonces que, dado un vector que contenga la cantidad actual de conejos, y la cantidad de conejos del mes pasado, es posible calcular el vector que contiene la cantidad de conejos en el mes próximo, y en el actual.

Vemos que si iniciamos con el vector de las condiciones iniciales: al multiplicar por la matriz, obtenemos el vector , y si repetimos, se obtienen los vectores , , , etc.

De esta forma, en la primer componente del vector siempre podemos ver la cantidad de conejos en el “mes actual”, seguido por la cantidad del mes anterior.

Podemos calcular entonces:

Aún más:

Es decir:

Entonces por inducción, podemos decir que:

Solución

Tomando tenemos que los autovalores son y , con y . Lo cual nos permite escribir:

Por lo tanto:

Para simplificar, podemos escribir:

En conclusión, podemos decir que:

Caso general

Sea una ecuación de recurrencia lineal de grado :

Se procede a armar el vector con los últimos n valores:

La evolución del vector está dada por el sistema:

Lo cual se puede escribir abreviadamente como:

Para simplificar la notación, vamos a llamar:

Mediante inducción, se llega a la expresión:

Donde es el vector con las condiciones iniciales.

Si resulta diagonalizable, llamando podemos calcular fácilmente:

Y para recuperar sólamente el elemento del vector, podemos escribir el producto:

Finalmente, bajo la condición de diagonalizable llegamos a la expresión:

Comentarios Finales

Logramos resolver una ecuación en recurrencia utilizando nuestro bagage de Álgebra Lineal, y es lindo, pero estos problemas también tienen otra solución tal vez más obvia desde el punto de vista de la Matemática Discreta. De todas formas, ambos enfoques se complementan muy bien.